Dando cobertura a un total de cuatro unidades en una jornada marcada por la caprichosa climatología sobre las clásicas especiales de «La Granja» y «Hoyomenor», la XV edición del Rallye de Guriezo resultó de lo más idónea para que los diferentes deportistas enfrascados en la estructura diesen los últimos retoques a sus monturas antes del inicio de sus programas nacionales y acumulasen kilómetros a modo de test.

El resultado más destacado lo lograba Fredy Tamés junto a su copiloto Ramón Suárez, ya que ganaba el Grupo N y además se aupaba hasta una meritoria octava plaza de la general con el Suzuki Swift Sport de la Copa, tomando contacto con los neumáticos Hankook a utilizar esta temporada.

Con idéntica montura realizó sus primeros kilómetros en la península Alberto Caracuel, demostrando una gran valentía y capacidad de superación para ir de menos a más en los siempre complicados tramos norteños. El piloto balear participó con el asturiano Pablo García a las notas, quien ya cuenta con experiencia en pruebas nacionales y lo guió por las carreteras de Guriezo.

Por su parte, el arteixán Roberto Blach Jr. y su copiloto Ariday Bonilla acabaron satisfechos tras sus primeros kilómetros con la nueva unidad del Peugeot 208 R2 que emplearán en el Campeonato de España de Rallyes de Asfalto, y aunque un pequeño toque en una rueda forzó su abandono cuando peleaba por el podio, sus conclusiones han sido realmente buenas. Además, tuvieron la ocasión de rodar en la jornada del domingo en unos test privados organizados por el equipo en Cantabria y de este modo hacer unos kilómetros extra.

Mala suerte también para el campeón balear Alberto Seguí, pues oficiando de coche cero con el Citröen DS3 R3T Max tuvo una leve salida a poco de concluir el primer tramo, no pudiendo junto a su copiloto Jandrín López rodar todo lo que les hubiese gustado en busca de un set up a medida.

Nos vemos muy pronto, ya que el Campeonato de España de Rallyes de Tierra arranca en Lorca el próximo fin de semana. Es por ello que RaceSeven sigue trabajando para que tanto los deportistas que confían en sus servicios como los vehículos a emplear lleguen con un buen número de kilómetros de puesta a punto y adaptación a sus espaldas.