Aunque el objetivo principal para el jovencísimo piloto Raúl Hernández no era otro que seguir sumando experiencia y coger ritmo a bordo del Peugeot 208 R2 en esta cita, el lanzaroteño salía bajo el brazo con un magnífico resultado este fin de semana. En concreto, este exigente desafío tuvo lugar en Liepaja, donde aprovechando la estructura del ERC, se disputaban la tercera y cuarta cita del campeonato de Letonia en el que está inmerso la estructura RaceSeven junto al deportista canario.
Tras el bagaje acumulado tanto en las pruebas de Alūksne y Sarma a principios de año, la tercera parada del campeonato supuso para Hernández un revulsivo importante a nivel mediático, pero sobre todo un excelente termómetro para medirse a los numerosos pilotos inmersos en la pugna de los vehículos R2.
Bajo la batuta y templanza del experimentado Rogelio Peñate en el baquet derecho, progresaron adecuadamente sobre las rápidas especiales de tierra, siendo además un rallye con doble significado para Raúl, pues precisamente aquí disputó en el pasado su primera prueba dentro del ERC.
Aprovechando su buen momento de forma y el conocimiento del tipo de terreno, Raúl y Rogelio marcaban cronos muy meritorios, pero lo más importante: conseguían hacerse con la segunda plaza en la LRC3 (destinada a los vehículos de la categoría R2), así como en el apartado reservado a los pilotos Junior en ambas jornadas de competición (correspondientes a la tercera y cuarta cita del campeonato de Letonia).
Con ello, la alianza entre RaceSeven y Raúl Hernández sigue dando sus frutos, siempre con la misión ampliar horizontes y metas en el envidiable currículum deportivo que con tan sólo 17 años ya atesora el bueno de Raúl Hernández. Así resumía su compañero de batallas Rogelio Peñate la experiencia del fin de semana:
“Estamos muy contentos con nuestro ritmo del fin de semana. Disfrutamos del domingo junto a Raúl Hernández repitiendo la P2 entre los R2 y Junior, al igual que el rally del sábado. Todo ello con muy buenos parciales y algún crono meritorio que en tramos rápidos como estos tienen aún más valor en un joven de 17 años. Hoy toca un lunes largo de vuelta a casa (4500 kilómetros), pero con fines de semana así los regresos parecen más cortos”.